LA GRAN BANCA ESPAÑOLA AFRONTA LA NUEVA NORMALIDAD CON 3.651 MILLONES DE EUROS EN PÉRDIDAS POR DETERIORO

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Como era de prever, la gran banca (Santander Esp., BBVA Esp., CaixaBank Esp., Sabadell Esp., Bankia y Bankinter) continúa con un descenso en sus resultados. El informe del primer semestre de 2020 sobre Banca, elaborado por la consultora Neovantas, presenta una disminución del Beneficio Neto agregado, en la actividad bancaria española, del -72,2% interanual, causado principalmente por las grandes provisiones realizadas para mitigar el impacto del escenario macroeconómico derivado del Covid-19. Todas las entidades nacionales han experimentado retrocesos en sus resultados, con respecto a los presentados en el mismo periodo del año pasado, destacando BBVA Esp. (-88,1% i.a.), Bankinter (-81,9% i.a.) y CaixaBank Esp. (-73,5%) como los bancos con mayores contracciones debido a las pérdidas ocasionadas por el deterioro de sus activos.

Los Gastos de explotación de la banca han disminuido un 14,4%, lo que nos indica que ahora es cuando las entidades bancarias están recogiendo los frutos de los planes de ajuste que acometieron en el pasado, como fueron la reducción significativa de sus plantillas y oficinas. Recordemos que CaixaBank Esp. (-32,8% i.a.) realizó uno de los mayores EREs del pasado año, con un coste de 978 millones de euros y, aunque haya visto disminuido sus gastos de explotación, destaca como la entidad con mayores gastos en este sentido por encima de los 2.000 millones de euros, con un ratio de eficiencia del 57,0%. Le sigue Santander Esp. que ha conseguido una reducción del -10,0% i.a. en sus gastos de explotación, situando su ratio de eficiencia en España en el 54,9%. Sin embargo, Bankinter incrementa en un 5,1% sus gastos de explotación, al incluirse los costes relativos al negocio de EVO, pero mantiene su ratio de eficiencia ligeramente por encima del 45%.

Si en el primer trimestre de 2020, se había notado un leve incremento de los Ingresos Recurrentes (Margen de intereses + Comisiones netas), este informe refleja que, por el contrario, han disminuido a nivel agregado un 1,7% i.a. Y es que aunque el cobro de Comisiones Netas ha supuesto para la gran banca, en este primer semestre, la obtención de 4.688 millones de euros, un 1,5% interanual, el Margen de intereses ha sido mucho menor con un decrecimiento del 3,4%, causado por los menores tipos de intereses, menores volúmenes medios y menor rendimiento de las carteras de renta fija.

Todo esto conlleva a que, durante este periodo, las Pérdidas por deterioro, a nivel agregado, hayan experimentado un gran aumento alcanzando los 3.651 millones de euros, lo que supone un 324,9% de incremento respecto al mismo período de 2019. Esto se ha debido, principalmente, al impacto negativo en los activos producidos por el escenario macroeconómico derivado del COVID-19. El mayor varapalo lo ha reflejado en sus cuentas de este año hasta la fecha, en términos porcentuales respecto al año pasado, el BBVA Esp. (1.360% i.a.), seguido de CaixaBank Esp. (441,2% i.a.) y Bankinter (389,6% i.a.). A todo esto se suman las dotaciones, que hasta la fecha en este año ascienden a 1.942 millones de euros para la gran banca.

RESUMEN PRINCIPALES DATOS

LA GRAN BANCA ESPAÑOLA AFRONTA LA NUEVA NORMALIDAD CON 3.651 MILLONES DE EUROS EN PÉRDIDAS POR DETERIORO

Para José Luis Cortina, Presidente de Neovantas, “está claro, que la crisis producida por el COVID-19 está teniendo consecuencias a nivel mundial sin precedentes. Sin embargo, estamos también ante una de las grandes ventajas que han surgido fruto de esta pandemia: la aceleración de la ruptura tecnológica. Se está produciendo un cambio social acelerado en los usos y costumbres y esto hace que las entidades financieras tengan que adaptar sus aproximaciones a los clientes en función de cómo van evolucionando sus necesidades, sus formas de actuación y toma de decisiones”.

Por lo que respecta al comportamiento bursátil, siguen las caídas significativas en las cotizaciones de las principales entidades bancarias, -30% de media respecto al mismo periodo de 2019, por su fuerte exposición a la crisis, materializada en un mayor riesgo de impago y una caída de rentabilidad por los bajos tipos de interés, así como por la falta de un modelo de negocio bancario convincente que pueda triunfar.

José Luis Cortina concluye “ahora, más que nunca, es fundamental la explotación sistemática de todo lo que los clientes indican a la entidad, tanto oralmente como por escrito. Particularmente, hay dos frentes en los que la disponibilidad de esta inteligencia derivada de lo que los clientes mencionan será clave: la gestión remota, para impulsar de forma acertada la acción comercial y ganar en vinculación con los clientes, y los recobros, para modular y gestionar la situación de morosidad creciente que viene y donde nuevas variables de perfil más cualitativo y derivadas de lo que los clientes apuntan serán relevantes”.

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